1912
La fundación de Rusqué
Àngel Rusqué empieza su aventura en un pequeño taller situado en unos bajos de Torelló. Con solo dos maquinas, una prensa de husillo y un torno, fabricaba conteras y virolas para las tornerías de la comarca.
1915
El inicio del paraguas
A consecuencia de la gran guerra europea, Francia y Alemania dejaron de suministrar los distintos componentes de los paraguas, varios fabricantes de Barcelona vinieron a Torelló, entonces reconocido centro de tornería y pequeña industria, para encontrar talleres dispuestos a fabricar este tipo de piezas, así fué como Rusqué entro en este particular mundo de los paragüeros.
1920
El primer traslado
Muy pronto, ante el crecimiento inicial, la empresa se trasladó a la Ronda Pollancredes, cerca del rio Ges, allí estuvo ubicada durante más de 70 años, realizando en este lugar, diversas ampliaciones.
1936-1939
El conflicto bélico
Durante la guerra civil, la empresa fue colectivizada y puesta a fabricar material de guerra, especialmente los casquillos de bala para el fusil Mauser.
1940-1950
La consolidación
Terminada la guerra civil, se inicia una etapa en que la empresa se especializa en fabricar diversos componentes del paraguas, y gracias a una tecnología propia, suministra millones de piezas a los confeccionistas de paraguas.
Fotografia: Francesc Català Roca
1965
La 2ª generación
A la muerte del fundador, ocupan la dirección de la empresa, el matrimonio formado por su hija María Rusqué y Eudaldo Fabregó, se amplían las instalaciones de Torelló, incorporando nueva maquinaria, para abastecer las necesidades de un mercado en constante expansión.
1975-1984
La 3ª generación
Por jubilación de sus padres, ocupa la dirección de la empresa Angel Fabregó Rusqué, nieto del fundador. La década de los 80 es de importantes cambios en el comercio europeo, Rusqué consigue acuerdos de exclusividad con empresas italianas especializadas en tejidos y monturas, ampliando así su oferta de productos.
1985
Los paraguas Cacharel
La invasión de paraguas a bajo precio procedentes de China, obliga a cerrar la industria europea de este sector, Rusqué decide continuar en el mercado, comprando la marca de paraguas Cacharel, y presentando una colección donde prima la moda, el diseño y la calidad.
1986
Los parasoles
Rusqué introduce en el mercado español los parasoles de madera, inicialmente fabricando solo la montura, y posteriormente al fusionarse con la empresa Toldifust S.L. y con la incorporación de Jordi Alberch como director comercial, pasó a ofrecer ya el parasol completo.
2003
El segundo traslado
Las instalaciones de Torelló se hacen pequeñas y la empresa se traslada a Les Masies de Voltregà donde dispone de una nave de 4000m2 para el desarrolla de sus actividades.
2011
La 4ª generación
Con la jubilación de Ángel Fabregó, ocupa la dirección de la empresa su hijo Carlos. Esta última década se caracteriza por el importante crecimiento de la línea de parasoles, actualmente, Rusqué ofrece una extensa gama de grandes parasoles de madera y de aluminio.
2012
El paraguas de pastor
Finalmente, como símbolo de identidad, Rusqué fabrica íntegramente en sus instalaciones el verdadero paraguas de pastor, con materiales ecológicos, como la madera y el algodón.
2012
El centenario 1912-2012
Se cumplen los 100 años de la empresa, y la Cambra de Comerç de Barcelona, hace entrega de una placa conmemorativa, como empresa centenaria de la comarca de Osona.